CARTA AL DIRECTOR. Por Juan Oñate, profesor de Geología y Biología
Vea en estas VISTAS AÉREAS el estado actual en el que se encuentran las obras

07/02/08. Opinión. El profesor de Biología y Geología Juan Oñate reflexiona en esta Carta al Director de EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com acerca del sentido que tiene la negociación anunciada entre los promotores del polémico macrocomplejo urbanístico de Los Merinos...

CARTA AL DIRECTOR. Por Juan Oñate, profesor de Geología y Biología
Vea en estas VISTAS AÉREAS el estado actual en el que se encuentran las obras

07/02/08. Opinión. El profesor de Biología y Geología Juan Oñate reflexiona en esta Carta al Director de EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com acerca del sentido que tiene la negociación anunciada entre los promotores del polémico macrocomplejo urbanístico de Los Merinos de Ronda y la Junta de Andalucía cuando estas obras -dos campos de golf y casi 800 viviendas de lujo en unos terrenos situados en la zona de contención de la Reserva de la Biosfera de la Sierra de las Nieves- “han proseguido a ritmo acelerado, a pesar de todas las dudas legales, en una política de hechos consumados a la que nadie ha querido poner freno, y, según puede verse en FOTOGRAFÍAS AÉREAS recientes, ya se ha causado un enorme destrozo al patrimonio natural con la destrucción de miles de encinas en época de cambio climático”.

¿Qué se puede negociar en Los Merinos cuando ya se ha causado un enorme destrozo al patrimonio natural?

ANTE las últimas noticias de prensa acerca de la posibilidad de una negociación entre la nueva empresa que está llevando a cabo las obras de urbanización de Los Merinos y la Junta de Andalucía, cabría preguntarse ¿qué es lo que se puede negociar, dada la situación?

LA Consejería de Obras Públicas tiene recurrido el proceso en los tribunales pues de un 25% de edificabilidad previsto en un principio se pasa, según noticias de prensa, a una ocupación de más de un 60% en el proyecto actual. Por otra parte, las actuaciones carecen de la autorización de la Cuenca Mediterránea para el aprovechamiento de aguas.

TODO esto en el supuesto de que las primeras actuaciones fueran legales pues así se recogían en el PGOU de 1991, pero no olvidemos que el texto de ese Plan General no se publicó en el BOJA en su día y por tanto carecía de dicha legalidad hasta que hace un par de años se publica, pero ya la ley urbanística de Andalucía no contempla la posibilidad de actuaciones como la de Los Merinos por lo que sigue siendo ilegal.

PUES bien, si las obras han proseguido a ritmo acelerado, a pesar de todas las dudas legales, en una política de hechos consumados a la que nadie ha querido poner freno, y, según puede verse en fotografías aéreas recientes, ya se ha causado un enorme destrozo al patrimonio natural con la destrucción de miles de encinas en época de cambio climático como la presente.

¿QUÉ se va a negociar? ¿El porcentaje de ocupación del suelo ahora que están hechos los viales? ¿Tapar los actuales y hacer otros nuevos? ¿Si se autoriza la utilización de agua de unos acuíferos ya catalogados como deficitarios por Cuenca Mediterránea? ¿Para dejar a pueblos enteros sin agua?

ES una situación incomprensible desde la perspectiva de vivir en un país civilizado y en un Estado de derecho, teniendo en cuenta todo lo que se conculca y la situación social explosiva a la que se puede llegar si, como puede suceder, poblaciones enteras se quedan sin agua.