Somos la segunda ciudad con más efecto “isla de calor” de Europa. Un efecto que se debe a la acumulación de hormigón, asfalto y otros materiales que absorben el calor, subiendo aún más los termómetros. Esto resulta demoledor para nuestra salud”

OPINIÓN. 
No hay Planeta B
Por Ecologistas en Acción Ciudad de Málaga


22/02/23. Opinión. Ecologistas en Acción Ciudad de Málaga, en su colaboración habitual para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre temas medioambientales, publica un texto de Carmen Segura, miembro de la asociación, en el que detalla actuaciones necesarias para fomentar la sostenibilidad y luchar contra el cambio climático: “Señor Francisco de la Torre: el modelo del hormigón...

...no es sano y va en contra de la Cumbre de París. Se trata de disminuir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero, no de aumentarlas. Véase la cementera, la central de ciclo combinado… o el caso de las macrogranjas que contribuyen al Calentamiento Global, como la de FAMADESA de Campanillas”.

El verano más frío del resto de tu vida

Los veranos van a ser cada vez peores. Al calor extremo se suman la no menos importante escasez de agua, las impredecibles olas de calor o de frío y otros fenómenos meteorológicos extremos, como lluvias torrenciales o temporales costeros que obligarán a regenerar esas playas artificiales que tenemos como garantes del turismo de sol y playa. Un modelo turístico que debe convertirse necesariamente en uno más sostenible. Mientras, el gobierno municipal sigue promoviendo urbanizaciones con césped natural y piscinas, cuya huella hídrica es insultante para los tiempos que vivimos, o fomentando el turismo de cruceros y de masificación que potencian el cambio climático y sus consecuencias sobre nuestra ciudad, entre otras. Queremos soluciones a esta problemática, y están ahí.


Somos la segunda ciudad con más efecto “isla de calor” de Europa. Un efecto que se debe a la acumulación de hormigón, asfalto y otros materiales que absorben el calor, subiendo aún más los termómetros. Esto resulta demoledor para nuestra salud. Y es que formamos parte de un sistema complejo en el que el Clima, la Biodiversidad, los Ecosistemas equilibrados son fundamentales para que tengamos salud.

Por todo esto, queremos una ciudad integrada en la naturaleza, y no al revés.

Queremos un Guadalmedina vivo, resultado de un proyecto de renaturalización como el que presentó en 2020 “Ecologistas en Acción Ciudad de Málaga”.

Queremos un Bosque Urbano en los antiguos terrenos de Repsol, una red de huertos urbanos, más zonas verdes en los barrios, con plantas adaptadas a nuestro clima…una Infraestructura Verde. Estas plantas proporcionan además un refugio climático frente a las olas de calor y favorecen la biodiversidad urbana, que nos ayuda a mantener un equilibrio ecológico y a disminuir la presencia de plagas que nos dejan enfermedades subtropicales a las que no estamos habituados.

Queremos un sistema público sanitario que cubra estos problemas de salud que nos trae el cambio climático.

Queremos un litoral sin asfaltar, sin playas artificiales que tanto dañan al ecosistema litoral.


Queremos un turismo responsable. Sin cruceros, que solo aportan toneladas y toneladas de CO2 que incrementan el Efecto Invernadero aumentando los efectos nocivos del Cambio Climático que se ceban en nuestra ciudad. Somos la zona cero de la crisis climática. Queremos un turismo gestionado, cuya demanda no merme las reservas hídricas de la ciudad.

Señor Francisco de la Torre: el modelo del hormigón no es sano y va en contra de la Cumbre de París. Se trata de disminuir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero, no de aumentarlas. Véase la cementera, la central de ciclo combinado… o el caso de las macrogranjas que contribuyen al Calentamiento Global, como la de Famadesa de Campanillas. Y se trata, sobre todo, de adaptarnos, de proteger a la ciudad ante los cambios que vamos a experimentar y que han comenzado ya.

A modo gráfico, unas ideas le damos, Francisco de la Torre:

- Cumplir su compromiso adoptado al declarar la “Emergencia Climática” en la ciudad de Málaga.

- Seguir las líneas estratégicas del Plan Alicia, el Plan del Clima del OMAU. El OMAU es el “Observatorio de Medio Ambiente Urbano”, que además es un organismo creado por el Ayuntamiento de Málaga. A día de hoy, no se ha cubierto ninguna de sus líneas.

- Plantéese de verdad mejorar y asegurar la calidad de vida de los y las malagueñas, en unas circunstancias tan poco deseables como las que nos ofrecen las previsiones de los expertos del IPCC, cada año más espeluznantes. Es su deber.

- No expandir la ciudad y aprovechar esos terrenos para la necesaria “Infraestructura Verde”. Recuerde, árboles que den sombra, adaptados a la escasez hídrica…y por favor, sin talas abusivas.

- El PIB no es el indicador correcto, señor Francisco de la Torre. Le sugiero trabajar con el IDH: Indice de Desarrollo Humano, que refleja la educación, salud y bienestar de una población, y no el poder adquisitivo mal repartido donde la pobreza y la gentrificación son la vergüenza del sistema que ha instaurado en Málaga.

Y por último, indicar para todos y todas, que es necesario “Decrecer” y ser más conscientes en nuestro consumo, que esconde distintos modos de contaminación. Un ejemplo es la moda. En cuanto al agua, si quieres comprar un pantalón vaquero de 800 gramos, éste supone un gasto de 8.000 litros y una camiseta de algodón de 250 gramos, 2.500 litros de agua. Piensa antes de consumir. Reduce tu consumo. Consume de segunda mano cuando puedas. Y por último, si quieres dar un paso más, organízate con tu vecindario o asóciate a organizaciones ecologistas.

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