OPINIÓN. Despacho abierto. Por Encarnación Páez
Alcaldesa de Villanueva de Tapia
01/12/17. Opinión. Encarnación Páez, alcaldesa de Villanueva de Tapia, discurre en su nuevo artículo para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre las migraciones, algo que considera “consustancial al ser humano”, pero que se encuentra con la oposición del “racismo y xenofobia” del mundo occidental. En el texto se hace mención a la polémica de la cárcel de Archidona que se ha convertido en un CIE “express”...
...según Páez recluir a migrantes en este centro penitenciario significa “tratar como presos a personas que no han cometido delito” y que la única falta de estas es “buscar un futuro mejor”.
Ilegales son los actos, no las personas
EN unos tiempos en que el dinero viaja sin pasaporte a los paraísos fiscales, es más necesario que nunca mostrar nuestra indignación hacia el humillante y vejatorio trato recibido por los seres humanos. La persona en sí misma considerada debería estar con carácter de urgencia en el centro de la acción política y social; la dignidad y los derechos humanos deben pilotar nuestras acciones y actuaciones muy por encima de los intereses económicos que capitanean las decisiones políticas y financieras.
LAS migraciones son consustanciales al ser humano, se han dado en todos los períodos históricos y forman parte de la dinámica natural del establecimiento de asentamientos en las diversas zonas del planeta.
EN estos tiempos se están produciendo grandes movimientos migratorios que hunden su raíz en la pobreza y en la desigualdad, en la desesperación y en la falta de oportunidades; y que cuenta como principal oposición con el racismo y la xenofobia del mundo occidental. El discurso del odio y del miedo hacia lo desconocido ha calado profundamente en la sociedad y ha producido una gran división entre los trabajadores, que ven como enemigos y ladrones de sus aspiraciones a los pobres inmigrantes que arriesgan su vida para buscar una vida digna.
INDIGNANTE especialmente es la situación que se está produciendo en la no inaugurada cárcel de Archidona. Se ha convertido en un CIE express en el que mantienen y tratan como presos a personas que no han cometido ningún delito. Un establecimiento que no se encuentra aún habilitado para presos comunes que han sido sentenciados y condenados, alberga a más de 600 personas a las que la única falta que se les puede imputar es buscar un futuro mejor. La carencia de permisos es una irregularidad administrativa, no un delito. Mientras, otros personajes pudientes y muy presumiblemente delincuentes de guante blanco a gran escala, se pasean tranquilamente por Ginebra o en sus yates de lujo… A buen entendedor…
ES urgente y necesario que la sociedad civil reaccione, pues nadie estamos exentos de nada y todos tenemos la obligación de construir un mundo más amable y habitable.
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