Periodista y secretario general de la FeSP
19/12/11. Opinión. “Ante la irritación de la denuncia en Linkedin de la periodista Azahara Cano y el portal ‘gratis no trabajo’, me pregunto porqué las organizaciones profesionales no apoyaron, en su momento, el proyecto de regulación laboral de los periodistas presentado al Congreso...
OPINIÓN. ¿Me quieren oír? Por Dardo Gómez
Periodista
y secretario general de la FeSP
19/12/11. Opinión. “Ante
la irritación de la denuncia en Linkedin de la periodista Azahara Cano y el
portal ‘gratis no trabajo’, me pregunto porqué las organizaciones profesionales
no apoyaron, en su momento, el proyecto de regulación laboral de los
periodistas presentado al Congreso de los Diputados en 2008 y rechazado por PP
y PSOE”. El periodista Dardo Gómez analiza en esta colaboración con EL OBSERVADOR /
www.revistaelobservador.com la situación de los profesionales de la comunicación en la
actualidad.
Un escándalo que viene de lejos
ANTE la irritación de la denuncia en Linkedin de la periodista Azahara Cano y el portal ‘gratis no trabajo’, me pregunto porqué las organizaciones profesionales no apoyaron, en su momento, el proyecto de regulación laboral de los periodistas presentado al Congreso de los Diputados en 2008 y rechazado por PP y PSOE.
EN las últimas semanas los periodistas estamos siendo noticia; desdichadamente, no por nuestra buena labor sino por la explotación laboral de la que somos objeto. Especialmente, en este caso, a los que trabajan a la pieza o son freelancers.
TODO ha venido a cuenta de la denuncia colgada en
Linkedin por la colega Azahara Cano que mostraba como una empresa ofrecía pagar
artículos de 800 caracteres a 0,75 euros por pieza para páginas web.
AUNQUE este tipo de ofertas no son nuevas; entre otras
fórmulas parecidas de explotación está la de la empresa suite101.net; que
ofrece pagar según los clips de la publicidad que insertan junto al artículo.
EL caso es que, justificadamente, esta denuncia
levantó el revuelo y periodistas de algún renombre mediático, organizaciones y
hasta TVE, más algunos otros medios, se hicieron eco de la afrenta.
TODOS escandalizados por algo que no tenía nada de
nuevo y que se viene denunciando desde hace muchos años.
AUNQUE no inducido por esta denuncia, pero casi
coincidente en el tiempo, el portavoz del PP, Esteban González Pons, declaraba
frente a la patronal AEDE el pasado 29 de noviembre que su partido “tiene claro que hay que ayudar al sector de la prensa y a
transformar el modelo de negocio, que no puede estar sostenido solo por
publicidad y hay que ir a por una cultura que dé valor a la información” y agregaba que “creemos que todo lo que está en Internet es gratis,
y eso es lo peor que nos podría pasar porque, si no pagamos, nadie colgará
contenido de valor…”.
CLARO él habla de pagar a las empresas, no a los periodistas… Por su parte desde la Santiago de Compostela la presidenta de la FAPE, Elsa González, haciéndose eco de la oferta de ignominia declaraba “el hecho de que la pieza se pague a esta cantidad demuestra cómo están los freelance, no sólo los de aquí, sino también aquellos que están en Egipto, Siria... que cobran tarde, mal y a veces nunca. Debemos ir hacia una regeneración de los medios y de la propia sociedad”.
Por sus frutos los conoceréis
EL Evangelio de San Mateo advertía contra los
discursos de los falsos profetas señalando “por sus frutos los conoceréis” y
creo que en este caso es muy aplicable al señor González Pons y a su partido.
CONVIENE recordarle que cuando en abril de 2004 se presentó la propuesta de Ley de reconocimiento de los derechos laborales de los periodistas, impulsada por los diputados de Esquerra Republicana-Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya Verds, fue el diputado Javier Elorriaga quien en nombre del PP rechazó la propuesta argumentando que “habría medios que no podrían soportar económicamente lo recogido en la proposición”.
ES bueno recordar que el PSOE también la rechazó
bajo el pretexto, en voz de su diputado Pedro Muñoz, que “esta situación se
superará con la aprobación del Estatuto del Periodista Profesional que se halla
a trámite”.
UN trámite que su partido se ocupó de postergar hasta la desvergüenza para que declinara esa legislatura sin ser tratado ese proyecto.
Menos escandalizarse
AUNQUE también habría que recordarle a la actual
presidenta de la FAPE que tiene la oportunidad de mejorar la actuación de
anteriores directivas que no apoyaran esa iniciativa para regular nuestras
condiciones laborales.
SOLO por sugerir, creo que lo primero que podría
hacer para apoyar sus sensatas declaraciones es considerar la conveniencia de
modificar el artículo 9 del proyecto de Estatuto del Periodista Profesional de
su organización que insiste en considerar a los periodistas a la pieza
trabajadores por cuenta propia; incluso cuando hicieren su trabajo “en
virtud de encargo”.
SERÍA una buena forma de comenzar a dar frutos.
Y en cuanto a muchos de los colegas renombrados que se han escandalizado ante la oferta injuriosa, sería interesante que miraran en el entorno de sus empresas e indagaran cuantos compañeros vienen haciendo desde hace años funciones de plantilla sin contrato o son obligados por sus empresas a defraudar a la Seguridad Social declarándose autónomos cuando no lo son.
Algo para recordar
AQUEL proyecto, silenciado por todos los medios e ignorado por los profesionalistas señalaba en sus fundamentos “Las condiciones laborales de los periodistas profesionales se han deteriorado seriamente en los últimos años. Las tendencias desreguladoras en el ámbito laboral, la aparición de nuevas técnicas de trabajo y la proliferación de los Licenciados en Periodismo salidos de las cada vez más numerosas Facultades de Ciencias de la Información, han sido factores que han incidido en mayor inestabilidad, más bajos salarios, abuso de las distintas figuras de contratos en prácticas y de aprendizaje, largos horarios y degradación general de los derechos de los trabajadores”.
Y abundaba “Los profesionales de la información
se encuentran, además, con una situación laboral indefinida dado el abuso que
existe de los colaboradores por piezas y de los becarios, lo que hace necesario
que se regule la relación laboral de estos trabajadores para evitar que se
encuentren desprotegidos como están actualmente, y cuáles son exactamente sus
atribuciones”.
ES decir, que ya entonces había quienes veíamos las orejas del lobo, que ahora nos está devorando, y nos asalta como al entrenador del Real Madrid el “porqué” no hubo un apoyo masivo de la profesión a esta propuesta, que había nacido del Foro de Organizaciones de Periodistas.
Lo que se proponía
EN varios de sus articulados se proponía temas
como que “El trabajo de los periodistas a la pieza tiene la consideración de
relación laboral de carácter especial, conforme lo previsto en el artículo
2.1.i) del Estatuto de los Trabajadores. Esta relación especial podrá
concluirse por las empresas con periodistas profesionales para satisfacer las
necesidades esporádicas de información sobre un tema o zona específica”.
Y marcaba: “Esta relación laboral deberá concluirse por escrito. En el correspondiente contrato se harán constar el tipo de trabajo contratados, las directrices generales a las que se someterá el periodista, la remuneración prevista para los distintos tipos de encargo y los responsables editoriales que dirigirán su trabajo, así como el plazo de vigencia del contrato.” Tampoco olvidaba que las “empresas informativas no podrán exigir la exclusividad de los servicios de los periodistas a la pieza. La presencia de una cláusula de este tipo en el contrato o la exigencia de hecho de tal exclusividad comportará la existencia de una relación laboral ordinaria sometida a los correspondientes convenios colectivos”.
También los becarios
ADEMÁS aspiraba a terminar con los abusos de los estudiantes en prácticas y becarios, indicando que “no podrán ocupar puestos de trabajo estructurales propios de las Redacciones o Departamentos Informativos. Sea cual sea la forma jurídica que adopten, los convenios que regulen esta relación tendrán naturaleza formativa. La supervisión de esta formación correrá a cargo de un tutor. Estudiantes y becarios no podrán superar el 10 por ciento de la plantilla de la respectiva Redacción o Departamento Informativo”.
COMO estamos comprobando los fundamentos de aquella
propuesta siguen siendo de total actualidad y el proyecto sigue allí a
disposición de quienes quieran luchar por sus reivindicaciones.
PUEDEN consultar su texto completo en http://www.sindicatperiodistes.cat/es/node/2144.
PUEDE consultar aquí anteriores colaboraciones de Dardo Gómez:
- 04/10/11
Silenciar
también es mentir…
- 13/97/11 El mito de la
autorregulación hace agua
- 05/07/11 Más “Indignados con
los periodistas”
- 09/06/11 15-M, acampadas y
periodismo
- 04/05/11 La colegiación y
otras monsergas
- 07/04/11 Vicios públicos y privados
- 03/03/11 Y a esto lo llaman corregulación
- 10/09/10 El sur existe y habla claro
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