El documento asume en sus páginas que la suya es una muestra insuficiente y nada probabilística, y que sus datos solo pueden servir para ‘aproximarse’ (sic) a la realidad laboral del periodismo

‘Sur’ se hace eco y lleva a titulares la “satisfacción del periodista al hacer su trabajo”. Tendría que explicar también porque un 89% dice entonces que su profesión ha perdido credibilidad y el 82% entiende que su situación laboral es precaria

La realidad retorcida. El diario ‘Sur’, gracias al informe, también destaca que la mayoría de periodistas está satisfecha con el grado de libertad que tiene. ¿Nos vale el conformismo impostado?

Presentado el primer Observatorio de la Prensa de Málaga, después de que el profesor de la UMA Carlos Pérez Ariza (también directivo del Colegio y de la Asociación de la Prensa) reventase su primicia en un artículo en La Opinión

06/03/17. Opinión. La Asociación de la Prensa de Málaga y la demarcación provincial del Colegio de Periodistas de Andalucía (que a la postre son lo mismo con la misma directiva) presentaron la semana pasada el primer Observatorio de la Prensa de Málaga (AQUÍ). Se trata de un documento de tres decenas de páginas con resultados insuficientes para hablar por la totalidad de los periodistas...

...que ejercen en la provincia. Lo asume el propio informe en sus primeras páginas: reconoce que sus resultados son aproximaciones dado que la muestra de la encuesta es insuficiente y nada probabilística. A pesar de ello, y a pesar de los malos datos que arroja (peor inserción de la mujer en el sector, por ejemplo, para vergüenza de las empresas editoras que les pagan menos y mal), los medios locales se han hecho eco del informe en un tono muy positivo. Así, el director del diario Sur, Manolo Castillo, tuiteaba el viernes pasado que era una buena noticia el titular de que la mayoría de los periodistas locales estaban “satisfechos” con el grado de libertad con el que trabajan. Vale preguntarse si esa satisfacción es fruto de la resignación, de la apatía, o del conformismo. Pero entre los descontentos, la principal razón es presiones “por parte de los jefes o de las empresas”, seguido de las presiones políticas de turno. Una información de EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com.

DA igual que arrojen los datos que los medios van a quedarse con lo positivo del primer Observatorio de la Prensa de Málaga. Lo presentó la semana pasada el Colegio de Periodistas de Andalucía en su demarcación provincial y la Asociación de la Prensa de Málaga, dos entidades que a la postre son lo mismo. Comparten directiva y función, y a pesar de que mientras se constituía el colegio se aseguró que las asociaciones desaparecerían para evitar duplicidades, tal extremo no se ha llevado a cabo. Las asociaciones, en las que están presenten tanto redactores bases y trabajadores como editores y altos cargos de los medios, a imagen y semejanza de los sindicatos verticales franquistas, no entran a resolver los problemas de fondo del sector que hoy día se siguen adoleciendo, como es la precariedad laboral o la falta de libertad editorial en las grandes cabeceras. En lugar de eso se plantan frente a banalidades que no preocupan realmente en la profesión, como el supuesto intrusismo que se ejerce cuando alguien trabaja de periodista sin el grado universitario correspondiente. Es un debate estéril que enfrenta a quienes ven en el periodismo una profesión y quienes ven en él un oficio. Pero, aun con este debate enconado, estas dos entidades presentaron un informe para nada.



ESTE primer Observatorio de la Prensa de Málaga suma una treintena de páginas y en su apartado segundo, sobre la metodología y las características de la muestra, el mismo informe asume que sus resultados son inasumibles y que ni sirven para hacerlos extensibles a los trabajadores de los medios malagueños. Un ejercicio de cinismo tanto de las asociaciones de la prensa, de la Diputación que lo paga como por parte de los medios locales que se han hecho eco de la investigación con un tono exageradamente positivo.

EN su segundo apartado el informe, en el que ha participado con su asesoramiento el catedrático de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Málaga Bernardo Díaz Nosty, explica que “la técnica empleada ha sido el muestreo no probabilístico, debido a las dificultades para obtener una selección aleatoria auténtica para la población objeto de estudio”. “Como consecuencia, los resultados que se exponen aquí no pretenden ser representativos de todos los profesionales del sector, aunque sí que pueden ofrecer una visión aproximada de la situación laboral en la que se encuentran”. Es una declaración tan absurda como complaciente. Es un decir “esto no sirve para nada, pero como nos pagan y además les gusta a los de la Asociación de la Prensa y a la Diputación, pues decimos cuatro chorradas y todos los implicados contentos, incluidos los medios que los publicaran”. Podíamos decir que se ha hecho una gran ejercicio de ese “gran periodismo informativo” veraz, libre y necesario que tanto se practica en Málaga.

ALGUNOS de los datos que más han llamado la atención en los titulares de medios como Sur es que la mayoría de los periodistas de la provincia están satisfechos con el grado de libertad en su trabajo. Según la encuesta de la Asociación de la Prensa malagueña, solo el 10,8% de los encuestados están insatisfechos con la libertad de la que disponen para trabajar. El 21,5% está “ni satisfecho ni no satisfecho” y el 43,1% está satisfecho. El 24,6% restante, “muy satisfecho” (?).


ENTRE las causas de la falta de libertad, el 35,4% de las respuestas asegura que “ninguna”, que puede ejercer “libremente” el periodismo. La segunda razón está cerca, y el 33,8% habla de “presiones por parte del jefe, por parte de la empresa”. El 26,2% habla de “presiones políticas” y el 12,3% “de los anunciantes” (que a la postre, pueden ser también presiones políticas, dada la elevada cuantía de inserciones publicitarias que contratan las administraciones públicas en la provincia con respecto a la inversión privada que existe en Málaga).

LOS grandes medios locales se quedan con la satisfacción del periodista a la hora de hacer su trabajo, como es el caso del titular de la semana pasada de diario Sur.


LO que tendrá que explicar este diario ahora es por qué el mismo informe señala cómo los encuestados entienden que se ha perdido credibilidad en la profesión (89% frente a quienes piensan que la credibilidad se ha mantenido igual, un 9%, y los que creen que han aumentado, un 2%). También se omite en el titular que el 82% de los encuestados entienden que la valoración de la situación laboral de la profesión es precaria, y el 16% restante entiende que es “mejorable”.

RECORDEMOS que la muestra no es probabilística: se han realizado tan solo 96 encuestas, 50 hombres y 46 mujeres. El 58,3% de los encuestados eran asalariados, el 19,8% autónomos, el 14,6% en paro, el 2,1% eran becarios, y el 5,2% jubilados. En géneros, la muestra omitió entrevistar a ninguna mujer becaria (0%).

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