Según la documentación aportada en el libro sólo se sancionó disciplinariamente a un policía por pegar al diputado del PSOE Carlos Sanjuán. Por lo que no hubo “32 policías detenidos, expedientados o traslados” como se ha dicho y recoge algún medio
Rafael Escuredo, expresidente de la Junta y diputado del PSOE en 1977, desmiente también haber participado en la comisión del Congreso que investigó la muerte de García Caparrós, al contrario de lo que indica Podemos y recoge el ‘ABC Sevilla’
Errores. El lugar donde realmente recibió el disparo el joven Manuel José García Caparrós aquel fatídico 4 de diciembre de 1977 o su nombre equivocado en una placa 15 años después de que el Ayuntamiento la colocase, son algunas de las claves que se pueden leer en el capítulo “Lugar en que García Caparrós recibió el disparo”, que EL OBSERVADOR le ofrece por su interés (AQUÍ)
27/10/17. Opinión. Los datos que se están facilitando extraídos de las actas de la Comisión de Investigación del Congreso sobre la muerte de García Caparrós el 4 de diciembre de 1977 cuyo ‘secreto’ ha sido recientemente levantado, están en entredicho según los documentos publicados en 2007 en el libro de Rosa Burgos editado por EL OBSERVADOR, “La muerte de García...
...Caparrós”. La diputada García Sempere ha tenido acceso a parte de los expedientes (con los nombres e iniciales borrados) de esta comisión de investigación del Congreso que estudió los hechos acontecidos aquel fatídico día. El libro de Burgos aporta actas y documentos que recogen lo que aparece en dichos expedientes. Según se recoge en el libro sólo se sancionó disciplinariamente a un policía por pegar a un diputado del PSOE, Carlos SanJuán. Por lo que no hubo “32 policías detenidos, expedientados o trasladados” según recoge eldiario.es el viernes 20 de octubre (AQUÍ). Además, Rafael Escuredo, diputado del PSOE en 1977 y presidente de la Junta de Andalucía entre 1979 y 1984, no formó parte de la comisión de encuesta del Congreso que investigó la muerte de García Caparrós, según ha indicado él mismo a esta revista y según se desprende de los documentos oficiales que publica Rosa Burgos en su libro. Al contrario de lo que indica Podemos en una información de ‘ABC Sevilla’ el lunes 23 (AQUÍ) donde se recoge que “la formación morada (junto a IU) quiere constituir ya la llamada ‘comisión de la verdad’ que se incluye en la Ley de Memoria vigente en Andalucía y que quienes investigaron el caso Caparrós (de la Torre o Escuredo, entre otros) vayan a dar explicaciones”. Francisco de la Torre sí que fue uno de los diputados que participaron en la comisión como recordaba esta revista ayer (ver noticia: El alcalde De la Torre exculpó de cualquier responsabilidad al entonces gobernador civil de Málaga, Riverola, ante la Comisión de Investigación del Congreso sobre la muerte de García Caparrós en 1977, como puede leerse en sus actas). Es una información de EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com.
DICIEMBRE de 1977. El día 4 cerca de 200.000 personas salen a las calles de Málaga para pedir la autonomía andaluza. Un joven afiliado a CC.OO que trabaja en Cervezas Victoria muere de un disparo ‘al aire’ camino al hospital. Cerca de cuarenta años después aún parece no saberse con certeza cuál es su nombre. Que desde hace 15 años exista una placa que conmemora a este joven en la que se lee José Manuel en lugar de Manuel José (como realmente se llamaba) no ayuda. Desde 2002 lleva colocada en la esquina donde convergen la calle Comandante Benítez y Alameda de Colón. Donde se atribuye que García Caparrós recibió el disparo. Pero ahí fue donde se le recogió del suelo para meterlo en el vehículo en el que perdería la vida camino al hospital. Según se demuestra en el libro de Rosa Burgos por declaraciones que se transcriben del sumario judicial abierto entonces, el joven malagueño recibió el disparo en la esquina donde convergen calle Vendeja y Alameda de Colón. Unos datos que aparecen en el capítulo “Lugar en que García Caparrós recibió el disparo”, y que puede leerse (AQUÍ).
HAY más datos a analizar extraídos de las actas de la comisión del Congreso ‘con los nombres tachados’. En medios de comunicación se han podido observar titulares como el del diario.es (AQUÍ) del pasado viernes 20 que indica que “32 policías fueron expedientados tras el crimen de Manuel García Caparrós, luchador por la autonomía Andalucía”. Un titular que apunta, según se recoge en la entradilla de la noticia (AQUÍ) que “tras el asesinato de Manuel García Caparrós, durante la manifestación del 4 de diciembre de 1977 en Málaga, se tomaron medidas disciplinarias contra 32 policías, que fueron ‘detenidos, expedientados o trasladados’ por la treintena de ‘disparos al aire’ aquella jornada, uno de los cuales acabó con la vida del joven de 18 años, dejando abierta una herida que no se ha cerrado cuatro décadas después”.
SOBRE los “policías expedientados” a los que hace referencia Sempere en el diario.es, en el libro de Rosa Burgos que edita EL OBSERVADOR en 2007 se recoge lo siguiente: “Por todos los hechos acontecidos durante los días 4, 5 y 6 de diciembre de 1977 en Málaga sólo se impone una sanción: la sanción disciplinaria que se aplica al policía de la Reserva de Linares que agredió al diputado Carlos SanJuán cuando iba acompañado del también diputado Francisco de la Torre. Esa sanción resulta anecdótica, es más, ni siquiera consta en ningún documento oficial en qué consistía y posiblemente se aplicara porque la agresión ocurrió en la misma puerta del Gobierno Civil y había testigos (el propio Francisco de la Torre y tres escoltas que el gobernador les acababa de nombrar debido a la tensión existente en las calles) y obviarla era poco menos que negar una evidencia”. Fuentes cercanas a la investigación del caso Caparrós han confirmado también a esta revista que no se expedientó a ningún policía por las actuaciones de aquellos días.
ADEMÁS, Rafael Escuredo, diputado en el Congreso en 1977 por el PSOE, no formó parte de la comisión de investigación de la muerte de García Caparrós como indican desde Podemos en una información publicada por ABC Sevilla el lunes 23 (AQUÍ). “La formación morada (junto a IU) quiere constituir ya la llamada ‘comisión de la verdad’ que se incluye en la Ley de Memoria vigente en Andalucía y que quienes investigaron el caso Caparrós (de la Torre o Escuredo, entre otros) vayan a dar explicaciones”. Escuredo, presidente de la Junta de Andalucía entre 1979 y 1984, desmiente a EL OBSERVADOR que formase parte de esa comisión que investigó el caso de la muerte de García Caparrós. En el exhaustivo libro de Burgos no se le menciona como declarante. Pero lo que es incontestable es que ni él estaba en Málaga ni la Policía Nacional era su responsabilidad.
LOS diputados que participaron en aquella comisión por los hechos acontecidos en Málaga fueron: Francisco de la Torre Prados (actual alcalde de la ciudad), Ignacio Huelin Vallejo y Jesús Viana Santa Cruz de UCD; Rafael Ballestero Durán y Ramón Bernal Soto del PSOE; Tomás García García del PCE y Juan Luis de la Vallina Velarde de AP (Alianza Popular). Así queda reflejado en el libro de Rosa Burgos, “La muerte de García Caparrós en la transición política”. En cuyos anexos aparece los documentos con el nombre de los ponentes parlamentarios que investigaron y declararon por los hechos acaecidos el 4 de diciembre de 1977 tanto en Málaga como en Tenerife, donde otro joven, Javier Fernández Quesada, murió por un disparo.
BURGOS utilizó para su obra las actas de la Comisión de Investigación del Congreso y el sumario judicial del caso para redactarla. Unos documentos oficiales que verán la luz el próximo mes de noviembre de la mano de un segundo libro de Burgos titulado “Las muertes de García Caparrós” y que edita EL OBSERVADOR como avanzaba esta revista el miércoles (ver noticia: Verdadera luz y taquígrafos sobre la muerte de García Caparrós. EL OBSERVADOR publicará en noviembre el nuevo libro de Rosa Burgos ‘Las muertes de García Caparrós’, con más de 600 documentos originales de la Comisión y del Sumario).
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