Salmón no participará en la campaña. Los medios cuestionaban que la directora de una tele pública formase parte del equipo del PP, cuando se le exige imparcialidad. ¿Es que al responsable de la información del Consistorio no se le debe exigir?

26/11/14. Opinión. Jesús Espino participará en el equipo del PP que hará la campaña de cara a las municipales en Málaga. Compatibilizará su puesto de propagandista con el puesto (dados los hechos, también de propagandista) que tiene como responsable de Comunicación del Consistorio malagueño. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com se sorprende al ver cómo los medios locales han clamado por la participación de la directora de Onda Azul en este equipo, a la que se le “presupone imparcialidad”.

¿POR qué a Espino no? ¿Porque el sí reparte los miles de euros de la publicidad institucional del Consistorio quizá?

ESPINO, director de Comunicación del Ayuntamiento de Málaga, realiza una información de divulgación de la labor corporativa para esta administración local totalmente sesgada. No favorece siquiera a la institución, sino al equipo de Gobierno de la misma, al partido que gobierne, el PP, desatendiendo las novedades y acciones que realizan los equipos de la oposición en la Casona del Parque, tal y como lamenta Eduardo Zorrilla, portavoz del grupo municipal de Izquierda Unida: “Espino nunca se ha creído lo de la transparencia”. Para ello, el edil de izquierdas rememora un informe conocido a principios de mes que situaba al Consistorio malagueño en una posición nefasta en cuanto a transparencia, comparado con otras administraciones locales. Concretamente, en el puesto 115 de 144.

AL concejal de la oposición no le falta razón y esta revista lo puede constatar. Desde hace meses no recibe ni una sola respuesta por parte del equipo de Comunicación municipal. Ninguna de las dudas que este medio remite a los responsables del Gabinete de Prensa obtiene contestación. Por el momento se han acumulado en la bandeja de salida medio centenar de misivas, sin respuesta. Cuando este medio ha reclamado explicaciones de por qué no se atienden nunca estas solicitudes del Ayuntamiento, ha llegado a responder uno de los funcionarios del Gabinete aclarando que su trabajo se limita a remitir el correo a sus compañeros competentes o responsables del tema sobre lo que se cuestiona. Pero no contestarlas. Pero nunca llega ni una sola de las respuestas.

ASÍ, Jesús Espino, como jefe del gabinete de prensa de la corporación local, hace una labor privada de jefe de prensa del PP, que no del Ayuntamiento de Málaga. Es decir, dinero público (todos los malagueños le pagamos por ejemplo su buen sueldo) para intereses privados (los del Partido Popular). En esta línea, justifica de forma evidente el por qué el Consistorio cae en los puestos más pobres de los rankings de transparencia. Se puede explicar en una entrada de su blog de abril de este mismo año (AQUÍ). El director de Comunicación del Ayuntamiento de Málaga resumía en una entrada una serie de tuits publicados por él mismo en su perfil a cuenta de un libro titulado La sociedad de la transparencia, obra de un escritor de origen surcoreano. Los tuits, procedentes del propio libro, no podían ser más alentadores, y significativos de lo que piensa el propio Espino: “La política es una acción estratégica, y por esta razón es propia de ella una esfera secreta. Una transparencia total la paraliza”. “Transparencia y verdad no son idénticas. Más información o acumulación de información no es verdad por sí sola. Le falta sentido”. “La sociedad de la transparencia va de la mano de la pospolítica. La política sin referencia degenera, convirtiéndose en referéndum”.

ESPINO ha trabajado para el Partido Popular antes de recalar en el diario Málaga Hoy durante un breve periodo que precedió su salto al gratuito 20 Minutos, cuya edición en Málaga ha dirigido durante varios años. Periodista por la Universidad de Gales afincada en Málaga (le costó dios y ayuda que su título se lo reconociese la universidad española, la UMA se lo rechazó varias veces) también ha trabajado como asesor de Carolina España en la anterior legislatura, cuando era concejala de Economía, lo que en parte explica su nombramiento. Fuentes del ámbito de la comunicación que esta revista consultó al hilo del nombramiento del responsable de Comunicación hablaban de él como un profesional válido, competente y comprometido. No sabemos por qué. Suponemos que se referían a su estrecha relación con el PP. Como profesional, utiliza su puesto, desde el que reparte cientos de miles de euros de publicidad institucional entre los medios malagueños sin más baremo que su real gana, para obtener réditos políticos para su partido, dificultando el trabajo de las redacciones que son críticas con la labor de gobierno municipal como esta revista, no cumpliendo con su trabajo y no facilitando información alguna a cuantas preguntas se le hacen llegar a su gabinete de prensa. Curiosamente, si el Ayuntamiento es de todos y todos los malagueños están representados en él a través de sus grupos políticos, ¿por qué desde su gabinete de comunicación no dan las noticias que generan estos grupos excepto las del PP? Para Espino no existen los miles de votos de malagueños obtenidos por el PSOE e IU. Solo existe el PP y sus votantes.

ASÍ pues el silencio de los medios locales con el nombramiento de Espino en el equipo que hará la campaña municipal para el PP se puede relacionar tal vez con el poder real que la formación conservadora todavía mantiene en el Consistorio: manejar el dinero público y las partidas de publicidad.

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