“Este 8 de marzo una vez más las mujeres tenemos que gritar alto y claro que no queremos estar tuteladas por ningún hombre. Que queremos decidir libremente sobre nuestro cuerpo. Que la lucha de las mujeres es una lucha de clases”

OPINIÓN. Por Remedios Ramos
Coordinadora de Izquierda Unida Málaga, concejala en el Ayuntamiento y candidata de Por Andalucía a la alcaldía


08/03/23.
Opinión. La concejala de Izquierda Unida, Remedios Ramos, escribe en este especial por el 8M Día Internacional de la Mujer de EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre los ataques al feminismo desde la derecha y la  ultraderecha: “Queda mucho camino para la igualdad real, una senda que tenemos que recorrer desde la coeducación y sin recortar derechos. Tenemos que combatir...

...los ataques que sufrimos las mujeres desde la derecha y la ultraderecha, ya que, desde las instituciones que gobiernan, quieren acabar con los avances logrados por el movimiento feminista”.

8 de marzo: juntas por la igualdad y frente a los ataques de la derecha y la ultraderecha

Vaya por delante mi llamamiento a la ciudadanía malagueña a participar de manera masiva en la manifestación convocada para este miércoles, 8 de marzo, a las 19:30 horas en la Plaza de La Marina, por la Coordinadora 8M de Málaga. Porque es necesario que todas las mujeres sigamos en la calle y luchando cada 8 de marzo hasta lograr una igualdad real y efectiva con los hombres en una sociedad justa.


A pesar de los innegables logros conquistamos por el activismo del movimiento feminista, la realidad es que el patriarcado no descansa y los ataques a las mujeres tampoco. También tenemos que destacar los avances normativos del ministerio de Igualdad, como la ley del aborto o la ley por la igualdad salarial, junto a las mejoras de las condiciones en el mundo del trabajo que benefician de forma especial a las mujeres -ya que sufrimos mayores cotas de precariedad y temporalidad- como la reforma laboral o la subida del salario mínimo interprofesional impulsado por la vicepresidenta, Yolanda Díaz, pero no podemos bajar los brazos en nuestras reivindicaciones contra el patriarcado, la prueba más sangrante de esta realidad es que siguen matándonos por el hecho de ser mujer.

Los sectores reaccionarios nos quieren en casa, relegadas a los cuidados y atrapadas en los roles dominantes de los hombres por encima de las mujeres. No es de recibo que cualquier directivo de una empresa gane más que una mujer directiva de la misma empresa. Queda mucho camino para la igualdad real, una senda que tenemos que recorrer desde la coeducación y sin recortar derechos. Tenemos que combatir los ataques que sufrimos las mujeres desde la derecha y la ultraderecha, ya que, desde las instituciones que gobiernan, quieren acabar con los avances logrados por el movimiento feminista.

Es en este contexto en el que el dirigente de la ultraderecha, Santiago Abascal, se permite dirigirse a las responsables del ministerio de Igualdad del Gobierno de España como “unas locas” y calificar como “asquerosa” una ley como la del ‘Sí es Sí’, que colma las aspiraciones del históricas del movimiento feminista al poner el consentimiento en el centro a la hora de juzgar los abusos. Con estos descalificativos la ultraderecha nos muestra su rostro: machista, violento y patriarcal. Se sienten atacados porque quieren perpetuar el rol de sumisión de la mujer y por eso braman y agreden.

Igual de lamentable es el comentario del dirigente del PP, Rafael Hernando, aludiendo a la insatisfacción sexual de las mujeres de izquierda, en un tono machista y baboso que, además, recuerda al de las despreciables arengas del golpista y criminal de guerra fascista, Queipo de Llano durante la Guerra Civil.


Las mujeres en Málaga sufren las coacciones e insultos de grupos ultraconservadores católicos espoleados por la ultraderecha y con la permisividad del gobierno del PP en la Junta cuando deciden libremente ejercer su derecho a la interrupción del embarazo. Los desahucios o el grave problema de acceso a la vivienda en Málaga también tienen a las mujeres como principales víctimas. Y el equipo de gobierno de Francisco de la Torre (PP), no hace nada por garantizar el derecho a la vivienda a muchas mujeres en grave situación social, en especial a víctimas de violencia machista, sin que existan las plazas necesarias de pisos de acogida. También es urgente aumentar el presupuesto municipal y la dotación de personal técnico para la atención integral a la mujer desde lo local.

Este 8 de marzo una vez más las mujeres tenemos que gritar alto y claro que no queremos estar tuteladas por ningún hombre. Que queremos decidir libremente sobre nuestro cuerpo. Que la lucha de las mujeres es una lucha de clases. Y que mientras grupos ultracatólicos se dediquen a amenazar a las mujeres que deciden ejercer el derecho a decidir y mientras no exista una igualdad real en todos los aspectos, las mujeres estaremos en las calles, juntas, luchando contra el patriarcado, dejando claro que tenemos los mismos derechos que los hombres y que seguiremos luchando por ellos.

Remedios Ramos. Coordinadora de Izquierda Unida Málaga, concejala en el Ayuntamiento de Málaga y candidata de Por Andalucía a la alcaldía de Málag