“Tomar medidas para la mitigación del cambio climático exige repensar el modelo económico actual y son los intereses económicos actuales la mayor oposición a estos cambios”
OPINIÓN. Tribuna Abierta. Por Félix Gil
Periodista
29/11/24. Opinión. EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. El periodista Félix Gil escribe en esta Tribuna Abierta sobre el cambio climático: “Si bien el cambio climático es conocido por la gran mayoría de la sociedad, las consecuencias del mismo y la urgencia de tomar medidas para su mitigación no llegan a la sociedad, debido a la dificultad de implementar soluciones en un sistema económico, el capitalismo, que busca...
...el crecimiento económico y la rentabilidad inmediata, desplazando los costes medioambientales a las generaciones futuras”.
Crisis climática
Las informaciones sobre la gravedad de la crisis climática son tan dramáticas que la sociedad prefiere mirar para otro lado, confiando en que las previsiones no lleguen a cumplirse, han manifestado en Arroyo de la Miel los catedráticos y profesores de la Universidad de Málaga participantes en una Mesa Redonda organizada por Benalmádena Sostenible y la Fundación democraciActiva.
Mariano Sidrach de Cardona y Alfredo Rubio explicaron cuál es la realidad del cambio climático y como está afectando tanto a la proliferación e intensidad de fenómenos meteorológicos extremos como a los cambios que se producen en la climatología de Málaga.
Tal y como llevan advirtiendo desde hace 40 años los informes científicos, se están cumpliendo las peores predicciones, y así, la temperatura media del planeta ha subido ya 1,5 grados, que era el límite que establecen los científicos para poder controlar los efectos del cambio climático. Esto es debido a que el consumo mundial de combustibles fósiles sigue creciendo y por tanto, también las emisiones de gases de efecto invernadero.
Como ejemplo de la gravedad de la situación se explicó que mientras que hace una década precipitaciones de 100 l/m2 se consideraban episodios puntuales graves, ahora estas precipitaciones son bastante más corrientes en distintos puntos de nuestra geografía. Por ejemplo, en la última DANA se han registrado valores de más de 500 l/m2.
En el debate que siguió a las intervenciones de los expertos, se puso de manifiesto que, si bien el cambio climático es conocido por la gran mayoría de la sociedad, las consecuencias del mismo y la urgencia de tomar medidas para su mitigación no llegan a la sociedad, debido a la dificultad de implementar soluciones en un sistema económico, el capitalismo, que busca el crecimiento económico y la rentabilidad inmediata, desplazando los costes medioambientales a las generaciones futuras. Dicho de otra forma, tomar medidas para la mitigación del cambio climático exige repensar el modelo económico actual y son los intereses económicos actuales la mayor oposición a estos cambios.
Así, explicaron que los informes científicos que se realizan sobre las medidas necesarias no se trasladan a la agenda política y mucho menos a la planificación del territorio, el cual se sigue tratando con un modelo en el que el cambio climático no existe, lo que nos impide un desarrollo urbanístico que tenga en cuenta los efectos del mismo.
Especial atención merece llevar la emergencia climática a los colegíos para que las nuevas generaciones conozcan los problemas a los que se van a enfrentar y a los que les va a tocar poner solución.
Poner la emergencia climática en el centro del debate público implica adaptar nuestra forma de tratar el territorio y las nuevas inversiones a esta nueva realidad, a la que de momento no se está haciendo caso. Como ejemplo, podemos ver que, en Valencia, las inundaciones han destruido infraestructuras públicas, colegios, institutos, etc… construidos en zonas inundables, que tendríamos que trasladar a otras zonas y no reconstruirlos en el mismo lugar.
Se puso de manifiesto también, la responsabilidad de los medios de comunicación en esta tarea y la importancia de las redes sociales en la desinformación de la sociedad lanzando bulos sobre las soluciones que se plantean para llevar a cabo la transición energética y que tiene como objetivo frenar la implementación de las medidas necesarias.
Afortunadamente, los profesores universitarios reflejaron que, pese al interés en ocultar la gravedad de la situación, contemplan en sus clases un renovado interés de sus estudiantes, así como un aumento de su compromiso técnico y social.
La amplitud de los problemas abordados y las características de la ciudad de Málaga, con zonas inundables donde se han construido viviendas y un litoral amenazado por la subida del mar, han llevado a los organizadores a plantear más encuentros en el futuro y a llamar a otras instituciones sociales a participar para informar y debatir sobre las posibles soluciones.