“Un nuevo culebrón para Marbella que dista mucho de quedar próximamente resuelto”
OPINIÓN. Bajo las alcantarillas
Por Manuel Fernández Valdivia. Empresario de San Pedro Alcántara
13/09/21. Opinión. El empresario Manuel Fernández Valdivia, en su habitual colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com, escribe sobre los problemas con la justicia del marido, el hijastro y el exguardaespaldas de la alcaldesa de Marbella Ángeles Muñoz, que para defenderse dijo que "en relación con las noticias recogidas en distintos medios de comunicación, el equipo de Gobierno informa que...
...ninguna de estas actuaciones guarda ningún tipo de relación con la alcaldesa de Marbella ni con la gestión municipal de este Ayuntamiento".
El “annus horribilis” de Ángeles Muñoz
Quién le iba a decir a la actual alcaldesa de Marbella y senadora por el Partido Popular, Ángeles Muñoz, que en febrero de este año su familia iba a iniciar un recorrido funesto que, como poco, continuará el año próximo, con las pesquisas iniciadas contra su marido, uno de sus hijastros y su exguardaespaldas, a la vez agente de la Policía Local, nada más y nada menos que por la Fiscalía de Estocolmo y la NOA sueca, como han ido adelantando diferentes medios nacionales y locales como Marbella Confidencial (AQUÍ).
El martes 2 de febrero de 2021, agentes de la Policía Nacional, pertenecientes a la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) desplazados desde Madrid, irrumpían en las oficinas de Wasa Real Estate, inmobiliaria fundada en el año 1982, afincada desde entonces en el Centro Comercial Plaza de Nueva Andalucía, propiedad del empresario sueco Lars Gunnar Broberg, a la sazón, marido de la actual alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz (AQUÍ).
A pesar de la repercusión policial, judicial y política del asunto, al día siguiente, desde el Ayuntamiento de Marbella solo se escapó un escuetísimo comunicado en el que se decía: "en relación con las noticias recogidas en distintos medios de comunicación, el equipo de Gobierno informa que ninguna de estas actuaciones guarda ningún tipo de relación con la alcaldesa de Marbella ni con la gestión municipal de este Ayuntamiento." Si no me falla la memoria, 9 días después, aprovechando una rueda de prensa sobre asuntos generales, Ángeles Muñoz, empleó 1 minuto y 20 segundos para desvincularse de la operación que afectaba a su marido (AQUÍ). Entendía además que se trataba de un nuevo ataque, ya no solo a su imagen, sino a la de Marbella. En cuanto escucho estas “respuestas tipo”, ya manidas en la historia política de España, recuerdo al catalanismo de los Pujol, abrigándose con la bandera local para desviar la atención. Poco o casi nada dijo del que fue su guardaespaldas y ni una palabra del por entonces huido de la justicia hijastro, Joaquim Peter Broberg. Cuanto menos, llamativo. Tampoco desde Génova 13, sede nacional del Partido Popular, se ha dicho nada al respecto. Dato también para analizar, tratándose de la alcaldesa de Marbella y senadora por Málaga, Ángeles Muñoz. Aunque sea, igualmente, para decir que es santa, católica, apostólica y constitucionalista. Los Pablos, Casado y Montesinos, siguen calladitos como… políticos.
Cuando parecía haber pasado lo peor, para que la alcaldesa pudiera pasar un verano lleno de fotos, placas, medallas y saraos varios, a principios de julio saltaba en España una noticia que en Brasil llevaba algunos días siendo la comidilla de los medios por su magnitud e, igualmente, importancia internacional. El 7 de este mes, la televisión brasileña, Fala Brasil, se hacía eco de una macrorredada en la que habían intervenido agentes de España, Inglaterra, Francia, Países Bajos y esta República Federativa, quedando arrestadas 740 personas, entre las que se encontraba el fugitivo Joaquim Peter Broberg, hijastro de la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz (AQUÍ).
En el reportaje brasileño se habló de narcotráfico, blanqueo de capitales, asesinatos y el uso de una curiosa aplicación móvil para la encriptación de mensajes entre grupos delictivos, rastreada desde hacía tiempo por la Agencia Nacional de Delitos de Gran Bretaña (NCA), junto a la Gendarmería Nacional francesa. Nuevamente, a pesar de la importancia de estos datos que van esclareciendo de forma muy elocuente a qué nos enfrentamos, de las conexiones familiares y de estas mafias con Marbella, desde instancias políticas, se ha optado por el mutismo. Ni una sola palabra. Como si de un niño asustado se tratara que, tras escuchar ruidos durante la noche, su táctica es la de esconderse bajo las sábanas de la cama. Quizás puedan creer que de lo que no se habla o lo que no se ve, no existe, pero las informaciones están ahí, cada vez con más frecuencia, cerrando un círculo que nos lleva azotando desde que Jesús Gil llegara al poder en la Costa del Sol.
Para más “inri”, en pleno agosto, los medios de comunicación dan a conocer una operación que, por sus similitudes, policías intervinientes, países e implicados, vuelven a salpicar a un posible entramado mafioso de narcotraficantes entre España [concretamente, San Pedro Alcántara] y Goteburgo (Suecia). Un grupo bien organizado y armado que, al parecer, ha causado la muerte de alrededor de 50 personas durante estos últimos años por ajustes de cuentas, que además utilizaba de tapadera una empresa de transportes en la denominada operación "Candinavia-Mueble", en la que colaboraron operativos de la Policía Nacional, la Guardia Civil y, nuevamente, la NOA sueca (AQUÍ).
La contundente acción policial se saldaba con la detención de 71 personas entre España y Suecia, la intervención de 55.000 unidades de un fármaco opiáceo utilizado como sustituto de la heroína, 85 kilogramos de cannabis, 4 kilogramos de marihuana, más de una tonelada de hachís, 500 kilogramos de marihuana, 23 kilogramos de anfetamina, 5 kilogramos de cocaína, 18 turismos, dos camiones, siete motocicletas, tres embarcaciones, casi medio millón de euros en diferentes divisas, material informático, un subfusil Kalashnikov AK-47, una granada de fracturación M52 y, por otra parte, se ha procedido al bloqueo y embargo preventivo de inmuebles, vehículos y cuentas bancarias por valor de más de 14 millones de euros, así como la incautación de numerosas obras de arte que superaban en la tasación inicial el millón de euros.
Curiosamente, esos inmuebles embargados, hasta 64 viviendas de lujo y parcelas de terreno, según la investigación, eran utilizadas para el blanqueo de capitales provenientes del narcotráfico. Terrenos que, según La opinión de Málaga (AQUÍ), podrían coincidir en localización con los que una vez fueron propiedad de la familia Broberg en la Vega del Jaque (AQUÍ) que, junto a la Vega del “Colorao” donde Ángeles Muñoz comparte mansión con Lars (AQUÍ), se han visto envueltos desde hace años, en un intento tras otro por parte del Partido Popular de Benahavís y Marbella, de regalar 170.000 metros cuadrados de terreno municipal del segundo al primero, ya que, en el pueblo regido por Ángeles Muñoz son, prácticamente en su totalidad, rústicos según el PGOU de 1986 y, en Benahavís, urbanos, con una más que evidente diferencia de valor inmobiliario y situación legal (AQUÍ) (AQUÍ) (AQUÍ).
El culebrón está más que servido y, por supuesto, señora Muñoz, cuando finalice el secreto del sumario, “quedará todo negro sobre blanco”. No sé qué quiso decir con esas palabras durante sus escasas explicaciones, pero desde luego, no que su marido, hijastro y exguardaespaldas sean inocentes o culpables de nada. Creo que se equivocó de expresión, sin decir claramente que todos o parte de los implicados son inocentes que, quizás en su posición, es lo que cabría esperar que dijera, dada la familiaridad que les vincula.
Y ¡ojo! porque de 2007 a 2019, el Partido Popular, ha ido perdiendo por el camino 432 votos anuales (AQUÍ). Creo que ya está tardando Pablo Casado en buscar sustituta para alcaldable en Marbella.
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