OPINIÓN. Al pie del cañón
Por Torremuelle. Vecino de Benalmádena
11/01/18. Opinión. El perfil en redes sociales Torremuelle AQUÍ recoge en su habitual artículo para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com las protestas de los vecinos ante la construcción de una gasolinera en el Arroyo de la Miel cercana a un colegio y a un instituto. En el texto el autor hace referencia a que el centro escolar afectado no ha iniciado protestas porque su director, Alejandro Lacal, es...
...del partido que gobierna en la localidad, PSOE y fue en la lista electoral del actual alcalde Víctor Navas. Añade que esta formación “se esfuerza enormemente por tener miembros en casi todas las AMPAs de los colegios del municipio para así asegurarse en cada legislatura un nutrido número de votos”.
¿Por qué en Arroyo de la Miel construyen una gasolinera a 30 metros de un colegio y nadie se moviliza ni sale a la calle a protestar?
COMO ya publicamos en este medio hace unos meses (AQUÍ), el concejal no adscrito de Urbanismo, Óscar Ramundo -que dejó Ciudadanos ante el temor de ser expulsado por engañar a sus militantes y apoyar un pacto encubierto con los socialistas-, otorgó licencia para construir una gasolinera "low cost" a 30 metros del colegio de educación infantil La Leala y a unos 80 metros del instituto de educación secundaria Poetas Andaluces, sin importarle las consecuencias que les podrían afectar a los más de 1.000 alumnos que acuden diariamente a estos centros. Y para colmo, como si no fuera la cosa con él, la semana pasada tuvo la desfachatez de vestirse en la Cabalgata de Rey Mago para repartir "caramelos e ilusión" a miles de niños, incluidos a los que se verán afectados por la apertura de esta futura estación de servicio. ¿Qué lo hizo por remordimiento, por protagonismo o por los caramelos?
TRAS la publicación de nuestro artículo en EL OBSERVADOR, el PP llevó una moción al Pleno municipal de noviembre para preguntar sobre la situación de esta gasolinera debido a la preocupación de muchos padres. El edil de Urbanismo contestó a dicha pregunta y "donde dijo digo ahora dice Diego".
RESULTA que en el Pleno de enero, por petición de los vecinos de la urbanización La Perla, el propio Ramundo llevó una moción -que se aprobó por mayoría- para suspender por el plazo de un año el otorgamiento de toda clase de aprobaciones, autorizaciones y licencias urbanísticas para las instalaciones de gasolineras en las zonas calificadas como IC (Industrial Comercial), debido -según dijo el edil- a "los ruidos provocados por los trenes de lavado, por la mayor afluencia de vehículos, por complicada maniobrabilidad, o por la presunta peligrosidad, etc." En cambio, en el Pleno de noviembre dijo que "aunque en nuestra ordenanza actual no está contemplado autorizar la instalación de gasolineras en el Polígono de La Leala, existe una Ley Estatal de rango superior que sí nos obliga a conceder este tipo de licencias, tanto de obra como de apertura". También añadió que había consultado a los técnicos de Servicios Industriales y que estos aseguraban que las "estaciones de servicio son absolutamente seguras" y que además "las medidas de seguridad impuestas por sus franquicias son sumamente exigentes y exhaustivas, y este tipo de establecimientos hoy día ya no se consideran de alto riesgo".
ANTE la exposición del edil de Urbanismo, no nos cuadran muchas cosas. ¿Por qué para los vecinos de La Perla sí es peligrosa una gasolinera al lado de sus casas y para los alumnos del colegio La Leala es absolutamente segura? ¿Por qué en enero no les preguntó a los técnicos de Servicios Industriales si es peligroso, o no, poner una gasolinera cerca de las viviendas? Y si hay una Ley Estatal, ¿para qué quiere llevar al próximo Pleno una modificación del PGOU para que no se instalen más gasolineras en zonas industriales?
OBVIAMENTE, lo preocupante de esta situación no es que la gasolinera explote, o no, sino los efectos de la contaminación que se pueden concentrar alrededor de esta gasolinera y que podrían desarrollar serias enfermedades en los menores. Un estudio realizado por un grupo de investigadores de la Universidad de Murcia (AQUÍ), demostró que los efectos de la contaminación que se concentra en las gasolineras se perciben desde los edificios que están a menos de 100 metros de éstas, sobre todo, por las emisiones procedentes de la evaporación de los combustibles de automoción derivadas de las operaciones de carga y descarga, repostaje y fugas líquidas.
LA investigación, que fue publicada en "Journal of Environmental Management" -una de las revistas científicas de mayor impacto-, determinaba que en las estaciones de servicio se registraban niveles de algunos compuestos orgánicos en el aire, como el benceno (AQUÍ) -que incrementa el riesgo de padecer cáncer-, superiores a los medidos en localizaciones urbanas donde la principal fuente de emisión es el tráfico rodado.
LA investigación recomendaba que debería respetarse una distancia «mínima» de 50 metros para viviendas y de 100 metros para actividades «especialmente vulnerables», como hospitales, centros de salud, colegios o centros de la tercera edad.
POR estos motivos, algunas madres del colegio La Leala han manifestado en la redes sociales -y por mensajes privados que hemos recibido en nuestro perfil- que se plantean cambiar a sus hijos de este colegio o descartar su elección para el próximo curso, ya que además de esta gasolinera que está a punto de abrir, también hay proyectado construir otra más en la zona.
ANTE esta situación, nos llamó bastante la atención que la AMPA del colegio La Leala -que se encuentra a 30 metros de esta gasolinera- o el propio director, como máximo responsable del centro educativo, no hubieran realizado cualquier acto reivindicativo que pudiera frenar dicha instalación, tal y como hicieron los vecinos de Torrequebrada con la construcción del Punto Limpio, teniendo en cuenta que a escasos metros también se encuentran otras dos gasolineras. ¿Por qué no se movilizan? ¿Cuáles podrían ser los motivos? Pues bien, nos hemos puesto a indagar y a preguntarles a algunos padres y madres y nos dicen que el director del colegio, Alejandro Lacal Gallardo, fue concejal del PSOE -en la oposición- durante la legislatura 2003-2007 y que en la lista de las últimas elecciones municipales que elaboró el actual alcalde, Víctor Navas, ocupaba el puesto número 17. ¿Sería este uno de los motivos por el que el director no tiene interés en que su colegio monte protestas contra el alcalde de su partido? Y en la AMPA, ¿hay algún o algunos militantes del PSOE que tampoco estén por la labor de realizar protestas al pentapartito liderado por su partido?
EN Benalmádena, es sabido por todos los vecinos que el PSOE se esfuerza enormemente por tener miembros en casi todas las AMPAs de los colegios del municipio para así asegurarse en cada legislatura un nutrido número de votos. El propio alcalde, Víctor Navas, fue presidente de la AMPA del colegio Jacaranda en Benalmádena Pueblo, así como también lo fue Javier Carnero, exalcalde del municipio y actual consejero de Empleo y Comercio de la Junta de Andalucía. De la misma AMPA también formó parte la concejala de Bienestar Social, y recientemente nombrada miembro de la ejecutiva provincial del PSOE, Irene Díaz. La concejala de Sanidad, Alicia Laddaga, también fue presidenta de la AMPA del I.E.S. Benalmádena y de la Federación Local de AMPAs de Benalmádena "La Comba". De igual manera, también se podrían poner ejemplos de otras legislaturas en las que algunos de los presidentes o vocales de las AMPAs terminaron siendo concejales en el Ayuntamiento de Benálmadena.
SI se supone que el PSOE es "sensible" con los problemas que les afectan a los colegios, donde casi todos sus candidatos surgen de las AMPAs y del entorno educativo, ¿por qué consiente que pongan una gasolinera al lado de un colegio cuando el municipio ya cuenta con 14 estaciones de servicio?
EN fin, nos resulta muy penoso que un municipio como Benalmádena donde tenemos la suerte de gozar de un clima fabuloso y un entorno envidiable donde nuestros hijos, el futuro de nuestro pueblo, podrían crecer y estudiar en un ambiente súper saludable, por culpa de estos políticos que solo piensan en llenarse los bolsillos, se tienen que fastidiar y respirar aire contaminado que reducirá su calidad de vida.
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