“Gan Pampols critica en los demás lo que a él le ocurre, que está marcado por sesgos políticos, es decir tendencia hacia unas ideas, como si tener ideas políticas fuese malo”
OPINIÓN. Charlas con Nadie
Por Manuel Camas. Abogado
26/11/24. Opinión. El conocido abogado Manuel Camas escribe su colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre el nuevo vicepresidente del Gobierno de la Generalitat Valenciana, Francisco José Gan Pampols: “Lo desafortunado de sus palabras es que se alinea con los que hacen política denostándola, como si no fuera con ellos, muestra desconsideración hacia los ciudadanos...
...que ejercen esa dignísima labor, entre los que él ya también se incluye, diga lo que diga, porque toma decisiones que serán juzgadas por los ciudadanos, sobre las que se informará y opinará”.
Un político
Un político, una política, según el Diccionario de la lengua española, es la persona que interviene en las cosas del gobierno o de cualquier otro modo en los asuntos públicos.
A la vista de las palabras del Teniente General retirado, Francisco José Gan Pampols, quizás no sea baladí hacer precisiones de lo que todo el mundo sabe, si eres nombrado vicepresidente del Gobierno de la Generalitat Valenciana te conviertes en un político, haces política.
Según publicaba el Diario El Mundo, el pasado 19 de noviembre, el general jubilado manifestó que el encargo que se le hace no consiste en “nada que tenga que ver con la política”, pero lo cierto es que el nuevo vicepresidente del Gobierno de la Generalitat Valenciana se dedicará a asuntos públicos desde un gobierno, tendrá entre sus funciones el diseño de un plan de recuperación y la coordinación de las labores de reconstrucción de las zonas afectadas, por lo que será también el responsable de presidir la Comisión Interdepartamental encargada de organizar y coordinar a todos los departamentos del Consell orientados al proceso de reconstrucción de las comarcas afectadas.
Creo que nuestro ejército está compuesto por buenos profesionales, no dudo por ello de la formación técnica y la capacidad que pudo tener el Teniente General Gan Pampols para el mando del ejército, lo mismo que tampoco dudo de que tiene ideas políticas, aunque mientras ha sido militar ha cumplido con su obligación de no expresarlas. Ahora que es político y se expresa políticamente, sus primeras declaraciones no han sido nada afortunadas.
Lo desafortunado de sus palabras es que se alinea con los que hacen política denostándola, como si no fuera con ellos, muestra desconsideración hacia los ciudadanos que ejercen esa dignísima labor, entre los que él ya también se incluye, diga lo que diga, porque toma decisiones que serán juzgadas por los ciudadanos, sobre las que se informará y opinará, como hacemos Nadie y yo ahora, tendrá que rendir cuentas, tendrá que someterse al control de las Cortes Valencianas, a las directrices de un Gobierno, etc.
Según Gan Pampols se trata de trabajo técnico que debe tener "un consenso de base, que todo el mundo esté de acuerdo en lo que hay que hacer, que los recursos que se van a dedicar son los necesarios y que no esté marcado por ningún sesgo político", pero para contratar técnicos no se les nombra vicepresidentes de un gobierno.
Gan Pampols critica en los demás lo que a él le ocurre, que está marcado por sesgos políticos, es decir tendencia hacia unas ideas, como si tener ideas políticas fuese malo, como si hubiese de enmendarse el art 1 de la Constitución: España se constituye en un estado social y democrático de derecho que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político.
Nadie y yo por eso calificamos de desafortunadas las declaraciones del militar retirado, ahora político, probablemente porque su discurso está sesgado hacia una tendencia política que oculta a los demás, sus palabras transmiten de la primera a la última una ideología que olvida que el pluralismo político necesita para expresarse de los partidos políticos, que los partidos son instrumentos que concurren para que sea posible la formación y la manifestación de la voluntad popular y que cuando el presidente de la Generalitat lo nombra y establece sus competencias lo hace con la legitimidad de haber sido elegido por los representantes del pueblo valenciano y que esos representantes puedan destituir al presiente y al vicepresidente, desde luego controlarlos y dictarles normas.
La tecnocracia rezuma por todas partes ideología, una ideología no democrática, por supuesto que los expertos deben contar para la gestión de los interese públicos, por supuesto que es mejor tener políticos bien formados, pero que no pretendan que su formación, sus opiniones, sus conocimientos, siempre limitados, sustituyan la capacidad de decisión de los ciudadanos, que no pretendan esconder tampoco sus ideas políticas detrás de sus títulos.
Estoy seguro de que Gan Pampols va a aprender rápido a hacer política, a priorizar recursos escasos, a decidir por ello preferencias, para eso aprenderá a negociar, convencer, pactar, mediar, actitudes muy alejadas de las artes militares, para eso quizás no esté tan preparado, aunque por supuesto le deseamos éxito en beneficio de valencianos y valencianas.
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