“Los datos disponibles para el 2023 señalan que las pensiones contributivas suben un 8,5%, lo que supone un aumento de media de 107 euros al mes con una retribución media mensual de 1.364 euros”
OPINIÓN. Viejos periódicos. Por Julio Fernández-Sanguino
Doctor en Ciencias Económicas y Empresariales
07/02/23. Opinión. Julio Fernández-Sanguino, doctor en Ciencias Económicas y Empresariales, escribe una nueva colaboración para EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com sobre las pensiones: “Profundizando en este tema, se aprecia que el salario mínimo interprofesional español, para el que se propone llegar hasta los 1.100 euros este año, tuvo una importante subida en el 2019, ya que los dos años anteriores estaba...
...sobre los 700 euros y desde 2008 hasta 2016 en torno a los 600 euros. Una gran cantidad de trabajadores han cotizado por el SMI, lo que explica que sus pensiones sean más reducidas que las que deberían de percibir”.
Las pensiones en el 2023
Los datos oficiales precisan que en enero de 2023 se ha registrado un gasto total de las pensiones en España de 11.902,11 millones de euros, importe que en su mayor parte va destinado a cubrir las pensiones de jubilación (8.649) y el resto se ha aplicado a las de viudedad (1.996,45), incapacidad permanente (1.062,94), orfandad (162,5) y de favor familiar (31,23).
Asimismo, señalan que en enero de 2023 se han computado 10,01 millones de pensiones en España, por lo que la pensión media resultante, teniendo en cuenta el importe total mencionado anteriormente, se ha situado en los 1.189,02 euros mensuales, 16.646,28 euros anuales en 14 pagas.
Las pensiones en su conjunto han tenido en enero un aumento del 10,76% con respecto al mismo mes del año pasado, debido fundamentalmente al incremento de los importes pagados, ya que el número de pensionistas solo se ha acrecentado ligeramente con algo menos de un uno por ciento.
Los datos disponibles para el 2023 señalan que las pensiones contributivas suben un 8,5%, lo que supone un aumento de media de 107 euros al mes con una retribución media mensual de 1.364 euros. Para aquellos que pertenecen al Régimen General la subida media será de 120 euros mensuales, que ascenderá a los 1.550 euros mensuales si se acaban de jubilar.
En la parte más alta están las pensiones máximas que afectan a unas 450.000 personas, paras las que, tras la subida del 8,5%, su prestación se situará en los 3.059,23 euros mensuales (42.829,29 euros anuales).
Algunas pensiones han sido destacadas, como las de los mineros que cobran 2.666 euros mensuales, mientras que el jubilado asalariado tiene una media de 1.527,8 euros. Sin embargo, ante el sobresalto que trasmiten algunos titulares, habría que preguntar: ¿a cuántos mineros afecta esta pensión? y ¿qué importancia relativa tiene con respecto al total de las pensiones? Las respuestas son evidentes y no necesitan comentarios.
Para las pensiones no contributivas se establece un incremento del 15% que beneficiará a otras 450.000 personas y supondrá una media de 72 euros al mes pasando de 484 a 556 euros mensuales (7.784 euros anuales), aplicándose una reducción si en el mismo hogar hay dos perceptores.
Esta última subida ha motivado críticas por el porcentaje aplicado, a pesar del mayor beneficio social que se consigue con una escasa repercusión relativa en el total del gasto, ya que suponen tan solo el 2% de las pensiones.
Con respecto a las pensiones máximas, las cifras escandalizan a algunos. Sin embargo, lo que debería de preocuparnos es que tan solo el 4,5% de los pensionistas cobren algo más de tres mil euros, cuestión que pone de manifiesto la baja retribución salarial de los españoles a lo largo de los años en relación con algunos estados europeos. Tenemos el caso reciente de los sanitarios que, tras invertirse tiempo y dinero público en su formación, se tienen que ir a otros países en mejores condiciones y cobrando más del doble de lo que podrían percibir en España, en el supuesto de encontrar trabajo.
Las diferentes aportaciones satisfechas es lo que ha generado la diversidad de pensiones, aunque con matizaciones. Aquellos que perciben las pensiones más altas resaltan que las bases de cotización aplicadas han sido por un importe superior, por lo que han aportado en exceso al sistema, estimándose que los sueldos altos llegarán a cotizar por un 64% más que su pensión de jubilación.
Otros se quejan, ahora, de que las empresas no cotizaron por el salario real que percibían. Profundizando en este tema, se aprecia que el salario mínimo interprofesional español, para el que se propone llegar hasta los 1.100 euros este año, tuvo una importante subida en el 2019, ya que los dos años anteriores estaba sobre los 700 euros y desde 2008 hasta 2016 en torno a los 600 euros. Una gran cantidad de trabajadores han cotizado por el SMI, lo que explica que sus pensiones sean más reducidas que las que deberían de percibir en relación con sus salarios.
De la misma manera, algunos colectivos han visto afectadas sus pensiones al haber estado en un régimen de ambigüedad, como los autónomos con una pensión media de 910,9 euros mensuales.
Hay que precisar que una pensión se ha ido nutriendo de las aportaciones realizadas durante toda la vida laboral de un trabajador y se calcula en base a las aportaciones satisfechas durante los últimos años de actividad, dato variable según los momentos que se ha situado en los 25 años. Asimismo, se ha ido ampliando la edad de jubilación para recoger más aportaciones, situándose este año en los 66 años y cuatro meses la edad para el cobro del 100% de la pensión, sin las broncas que hay por esta cuestión en otros países, como está sucediendo en Francia.
Por último, cabe aclarar que el concepto de pensión no se debe considerar como un gasto, como nos quieren hacer ver algunos, o confundir con las necesarias subvenciones de subsistencia, ayudas sociales u otras medidas económicas coyunturales, temas que necesitan una exposición aparte en otro contexto.
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