El 12 de marzo de 1986 Málaga vota mayoritariamente a favor de la entrada en la OTAN bajo la fórmula de evitar la integración en la estructura militar

OPINIÓN. 
Málaga y sus historias. Por Ramón Triviño
Periodista

27/10/21. 
Opinión. El periodista Ramón Triviño, en su colaboración habitual con EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com, en la que recopila curiosidades de la historia de Málaga, escribe un texto sobre el referéndum de la OTAN: “Los resultados de la consulta abrieron paso a un largo debate en el seno de la sociedad española debido a que sectores de la izquierda y los movimientos pacifistas, denunciaron...

...el giro de 180 grados dado por el PSOE ante la consulta y de que el Gobierno socialista de Felipe González utilizó toda la fuerza del Estado y los medios públicos para doblegar la voluntad de la población que, en las encuestas, se manifestaba favorable a la salida de la OTAN”.

El referéndum de la OTAN en Málaga

El 12 de marzo de 1986 Málaga vota mayoritariamente a favor de la entrada en la OTAN bajo la fórmula de evitar la integración en la estructura militar.


Un asunto que provocó una gran división social y política en todo el país y que llevó al PSOE a variar su posición inicial de no continuar en esta organización a la de mantenerse y al entonces presidente del Gobierno, Felipe González, a anunciar que si salía el no, dimitiría. Finalmente, no tuvo que tomar esa decisión ya que ganó el sí con el 53,09 por ciento de los votos.

Con una participación del 58,11 por ciento del censo electoral, 445.391 personas, el 63,63 por ciento de los malagueños votó favorablemente a la pregunta recogida en las papeletas, ¿Considera conveniente para España permanecer en la Alianza Atlántica en los términos acordados por el Gobierno de la nación?, mientras que el 32,06 por ciento se mostró en contra.

De los 99 municipios que entonces existían la provincia, en 85 ganó el sí, siendo la pequeña localidad de Pujerra donde obtuvo un mayor respaldo esta opción ya que el 90 por ciento de los votantes apostó por la permanencia en la OTAN.

Felipe González durante la campaña del referéndum

En el lado contrario, hubo catorce municipios donde se impuso el no. Estos fueron Almáchar, Arenas, Arriate, Atajate, Benamargosa, Cañete la Real, Carratraca, Casabermeja, Frigiliana, Teba, Torrox, Totalán,Valle de Abdalajís y Humilladero. Fue este último municipio, gobernado por Izquierda Unida, donde hubo un mayor rechazo a la permanencia en la Alianza Atlántica ya que el 73,28 por ciento de los votantes se mostró en contra.

Sólo aventajada por Cádiz y Sevilla, la provincia de Málaga apoyó el sí, lo que motivó la identificación del territorio con el PSOE al ponerse de manifiesto que Andalucía era la comunidad más favorable a la integración, seguida de Castilla-La Mancha y Extremadura, los feudos más sólidos del Partido Socialista. Por el contrario, el voto negativo se impone abrumadoramente en el País Vasco, y en menor medida en Cataluña, Navarra y Canarias.

Los resultados de la consulta abrieron paso a un largo debate en el seno de la sociedad española debido a que sectores de la izquierda y los movimientos pacifistas, denunciaron el giro de 180 grados dado por el PSOE ante la consulta y de que el Gobierno socialista de Felipe González utilizó toda la fuerza del Estado y los medios públicos para doblegar la voluntad de la población que, en las encuestas, se manifestaba favorable a la salida de la OTAN.

Además, los mismos sectores pusieron en solfa la pregunta realizada en la consulta por tendenciosa y posteriormente pusieron de manifiesto el incumplimiento de las tres condiciones propuestas en el referéndum, la no inclusión de España en la estructura militar integrada de la OTAN, a la que se incorporó bajo el gobierno de Aznar en 1997; mantener la  prohibición de instalar, almacenar o introducir armas nucleares en territorio español; así como la reducción progresiva de la presencia militar de los Estados Unidos en España.

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