“El Gran Hotel de Roma, fue el establecimiento hotelero de mayor prestigio de la ciudad de Málaga que estuvo en funcionamiento hasta el año 1907, cerrando sus puertas como consecuencia de la gran riada de ese año”

OPINIÓN. 
Málaga y sus historias. Por Ramón Triviño
Periodista

01/03/23. 
Opinión. El periodista Ramón Triviño, en su colaboración habitual con EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com, en la que recopila curiosidades de la historia de Málaga, escribe sobre el Gran Hotel Roma: “Este hotel se convierte en uno de los primeros edificios en disponer de ascensor. El patio del edificio se convirtió en el preferido de la burguesía malagueña de comienzos del siglo XX, donde...

...se celebran tertulias, veladas literarias, artísticas y políticas”.

El Gran Hotel Roma

El Gran Hotel de Roma, fue el establecimiento hotelero de mayor prestigio de la ciudad de Málaga que estuvo en funcionamiento hasta el año 1907, cerrando sus puertas como consecuencia de la gran riada de ese año. Este hotel, que se llamó Regina a partir de 1907, ocupaba un gran edificio de finales del siglo XVIII, con una magnífica portada presidida por un escudo nobiliario. Su fachada principal daba a Puerta del Mar, indicio de que se construyó cuando la Alameda todavía no se había convertido en el primer paseo de la ciudad.

La publicidad del local afirmaba en 1894 que se hallaba montado “completamente a la moderna y con gran confort, y que disponía de los servicios de grandes salones para familias, lista de restaurant, sala de lectura con diarios extranjeros, ascensor, intérpretes y coches de lujo” que transportaban a los viajeros desde la estación de tren hasta la puerta del hotel. Este hotel se convierte en uno de los primeros edificios en disponer de ascensor.

El patio del edificio se convirtió en el preferido de la burguesía malagueña de comienzos del siglo XX, donde se celebran tertulias, veladas literarias, artísticas y políticas.


En el Hotel Roma se hospedaron los personajes importantes cuando llegaban a Málaga. Entre los huéspedes ilustres se encontraron Benedetto Croce, un escritor, filósofo, historiador y político italiano, que fue figura destacada del liberalismo, cuya obra influyó en pensadores italianos tan diversos como el marxista Antonio Gramsci, el fascista Giovanni Gentile o el liberal Piero Gobetti; además del escritor Benito Pérez Galdós, el general Polavieja, político y militar que entre otras muchos cargos fue capitán general de Filipinas, y la gran actriz Rosario Pino, que fue objeto de un homenaje en 1914. Fue recibida en el patio del hotel por la banda municipal de música y tuvo que saludar desde el balcón a la multitud que la vitoreaba en la calle. Este magnífico edificio, originalmente constaba de bajo, entresuelo y dos plantas, pero en la segunda mitad del siglo XIX se le añadieron dos nuevos pisos. El autor de esta reforma fue el arquitecto Jerónimo Cuervo, el cual le otorgó a la construcción la imagen que hoy presenta. Del inmueble destaca su portada monumental, de mármol rosa. El patio es de gran elegancia, con columnas toscanas que sostienen arcos de medio punto decorados con yeserías.

El hotel entró en declive al inaugurarse el Hotel Príncipe de Asturias, posteriormente Hotel Miramar, cesando definitivamente su actividad coincidiendo con la Guerra Civil Española. Actualmente es propiedad de la empresa Edipsa, que se encargó de restaurarlo y salvar el edificio del estado de ruina en el que podía haber caído. Desde 1986 alberga oficinas.

Pie de foto: Patio interior restaurado del Hotel Roma.

Puede ver aquí otros artículos de Ramón Triviño