“El mensaje ecologista es —para algunos— extraordinariamente molesto. Son verdades que nos muestran lo mal que estamos haciendo las cosas —o lo que es lo mismo— lo tontos que somos”
OPINIÓN. ECOselección BlogSOStenible. Por Pepe Galindo
Profesor de Lenguajes y Sistemas Informáticos de la UMA
24/05/24. Opinión. El profesor de la UMA, Pepe Galindo, comparte en su espacio de colaboración en EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com textos de su web BlogSOStenible. En esta ocasión escribe sobre las consecuencias de llenar el planeta de carreteras: “Las carreteras pueden facilitar una destrucción y unos impactos mucho más graves de lo que ellas mismas destrozan...
...directamente. Cuantas menos carreteras construyamos, menos poder destructivo daremos a los magnates del desastre”.
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Ecología del transporte: las consecuencias de llenar el planeta de carreteras
El mensaje ecologista es —para algunos— extraordinariamente molesto. Son verdades que nos muestran lo mal que estamos haciendo las cosas —o lo que es lo mismo— lo tontos que somos. Hay que ser humilde y tener ganas de mejorar para aceptar el reto que se plantea. Sin duda, lo más cómodo es atacar al mensajero.
La Ecología del transporte es un campo que estudia las bioimplicaciones de nuestros sistemas de trasladarnos (por tierra, mar y aire, incluyendo aviones, trenes o motos de agua). La Ecología de carreteras es un subcampo que analiza todo el daño ecológico de esas infraestructuras, como por ejemplo:
- Animales atropellados.
- Rutas migratorias cortadas.
- Contaminación por CO2, ruido, plásticos… y también, por supuesto, por partículas y caucho de los neumáticos.
- Destrucción indirecta. Por ejemplo, las carreteras son infraestructuras necesarias para el desastre climático, facilitan provocar incendios forestales y ayudan a expoliar los bosques (permitiendo el transporte de los troncos y haciendo posible ganadería y agricultura donde sería inviable sin estas vías).
En síntesis, las carreteras pueden facilitar una destrucción y unos impactos mucho más graves de lo que ellas mismas destrozan directamente. Cuantas menos carreteras construyamos, menos poder destructivo daremos a los magnates del desastre.
Se ha demostrado que los incendios forestales son más frecuentes en las zonas donde hay vías de acceso. Casi todos los incendios son de origen humano y los caminos facilitan el acceso a los que provocan el fuego (intencionadamente o no).
Medidas necesarias para paliar el problema:
- Aprobar una moratoria a la construcción de nuevas carreteras (no solo autopistas).
- Mejorar la red de ferrocarriles y abaratar sus billetes. En esto, excluimos los trenes de alta velocidad por su enorme impacto ambiental.
- Desmantelar carreteras infrautilizadas. Estudiar qué vías no son rentables (mirando diversos parámetros) y eliminarlas, para devolver ese espacio a la naturaleza y para ahorrar sus costes de mantenimiento.
Aunque no se le da mucha publicidad, está ocurriendo —en EE.UU. por ejemplo— al igual que la destrucción de presas inútiles en ríos.
El investigador Jeff Kenworthy ha demostrado las bondades de destruir autopistas y mejorar la red ferroviaria.
- Expulsar el coche [del centro] de las ciudades. Se ha demostrado que es la mejor manera de fomentar el transporte público.
- Poner peajes a las autopistas para reducir el tráfico y que los costes no sean soportados por todos los que no usan esas infraestructuras. Esto debe hacerse, al menos, para vehículos privados. Para mercancías o transporte colectivo, se puede optar por otro tipo de tasas que graven particularmente los viajes largos y los productos de alto impacto.
- Encarecer el comercio de mercancías a largas distancias para desincentivar el abuso. Los ingresos por esos impuestos deben dedicarse a fomentar alternativas locales y ecológicas. Los acuerdos comerciales de productos agrarios provocan problemas en el campo, como ya se ha comentado en otro artículo de Blogsostenible.
- Hay que permitir que la fauna pueda cruzar las rutas: construir puentes y túneles para todo tipo de animales y no solo para los más grandes como ciervos o lobos, sino también para anfibios o reptiles. Debemos darles prioridad. En India hay una autopista sobre un bosque para que la fauna viva debajo de ella sin cortarle el paso. En EE.UU. se están dedicando fondos federales a construir pasos para fauna en toda su red de carreteras.
Como decía un chiste de El Roto…, ya que sabemos lo que habría que hacer, haremos cualquier otra cosa.
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