A través de su sobrino y representante legal,
Luis Portero, exige que se informe de que la primera solicitud de expropiación
del inmueble data de marzo de 2007
17/03/11. Urbanismo.
En marzo de 2007 la difunta madre del alcalde de Málaga, María Victoria Prados,
solicitó la expropiación de la casa de su propiedad situada en la calle Rosal
Blanco nº 6. Aclarado este punto, la noticia Rosal Blanco 6, un caso de
acoso inmobiliario que el alcalde de Málaga...
17/03/11. Urbanismo.
En marzo de 2007 la difunta madre del alcalde de Málaga, María Victoria Prados,
solicitó la expropiación de la casa de su propiedad situada en la calle Rosal
Blanco nº 6. Aclarado este punto, la noticia Rosal Blanco 6, un caso de
acoso inmobiliario que el alcalde de Málaga...
A través de su sobrino y representante legal, Luis Portero, exige que se informe de que la primera solicitud de expropiación del inmueble data de marzo de 2007
17/03/11. Urbanismo.
En marzo de 2007 la difunta madre del alcalde de Málaga, María Victoria Prados,
solicitó la expropiación de la casa de su propiedad situada en la calle Rosal
Blanco nº 6. Aclarado este punto, la noticia Rosal Blanco 6, un caso de
acoso inmobiliario que el alcalde de Málaga y sus hermanos tratan de arreglar
antes de las elecciones tras décadas de abandono, desprecio y condena a la
miseria a sus inquilinos publicada
el pasado martes por EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com está en lo cierto.
Manuela Rivera, inquilina de Rosal Blanco desde 1975, señala que nunca nadie de
la familia de Francisco de la
Torre (PP) ha visitado el inmueble hasta la pasada semana,
cuando el Defensor del Ciudadano, Francisco Gutiérrez, denunció que parte del
techo se había desplomado a causa de las últimas lluvias.
EL pasado martes 15 de marzo
el abogado Luis Portero, sobrino del alcalde de Málaga y representante legal de la familia De la Torre en el caso de Rosal
Blanco, telefoneó a EL OBSERVADOR para exigir una
rectificación en el plazo de 48 horas a la noticia publicada sobre este asunto
ese mismo día. En caso contrario, Portero aseguró en un correo electrónico lo
que había adelantado por teléfono: “Iniciaremos sin más dilaciones acciones
legales para salvaguardar los intereses de los herederos de María Victoria
Prados Gómez, demanda en la que nos veríamos obligados a solicitaros la
publicación de la sentencia y el resarcimiento de los daños y perjuicios
ocasionados, valorables económicamente”.
PORTERO aportó en ese mismo correo electrónico una documentación de la que esta revista carecía para constatar que la primera solicitud de expropiación de la casa de Rosal Blanco se produjo en marzo de 2007, queriendo subrayar con ello que el “alcalde y su familia está
interesada por la situación en la que viven sus inquilinos”. Los arrendatarios
de Rosal Blanco son una madre separada, Manuela Rivera, junto a sus dos hijos y
la septuagenaria Carmen Sarmiento. Aclarada la fecha de la primera solicitud de
expropiación, en nada cambia la información que EL OBSERVADOR dio el martes, que comenzaba así: “La difunta madre del alcalde de Málaga, María Victoria
Prados, el propio regidor, Francisco de la Torre Prados, y sus
hermanos son los responsables, como propietarios del inmueble situado en la
calle Rosal Blanco número 6, de que a día de hoy la casa se caiga a pedazos con
sus inquilinos dentro”. Varios hechos demuestran que pese a lo indicado por
Portero, la familia De la Torre
no se ha interesado durante décadas por sus inquilinos, abandonando su deber de
mantenimiento del edificio hasta solicitar el estado de ruina en 2008.
LA casa de Rosal Blanco es de 1890. Carmen Sarmiento lleva habitándola desde que nació hace setenta años. Manuela Rivera vive allí desde 1975. Ambas no han dejado de pagar el alquiler mensual que actualmente es de 70 euros. Hace 12 años, en 1999, se produce la primera denuncia por el alarmante estado de conservación del edificio. No ha sido la única. Hay informes policiales que constatan el abandono y mal estado del caserón desde entonces. Sólo a instancias de los requerimientos de la Gerencia Municipal de Urbanismo de Málaga, la propiedad ha acometido dos mínimas reformas: reponer parte de la escalera que se había desmoronado y reforzar con un puntal una estancia superior que amenaza, aún hoy día, con desplomarse. “Parches que en absoluto han solucionado los problemas de fondo”, tal y como indica el Defensor del Ciudadano, Francisco Gutiérrez, y constata esta revista, que desde 2007 ha comprobado in situ el miserable y desolador estado del inmueble.
AL menos desde 2007 un grupo de okupas se ha instalado en uno de los habitáculos de la parte inferior de la vivienda.
HASTA la semana pasada, nunca nadie de la familia del alcalde Francisco de la Torre se había personado en la casa de sus inquilinos para comprobar el estado de conservación de la misma, afirma Manuela Rivera, quien ya apuntó este hecho en 2007. Los contactos de los arrendatarios con la propiedad han sido a través de un administrador de fincas y se han limitado al pago de las mensualidades, señala Rivera.
PORTERO aseguró el pasado martes a esta revista que en varias
ocasiones la familia del alcalde de Málaga ha
ofrecido personalmente a los inquilinos ser realojados en otras de las
propiedades de la difunta María Victoria Prados. Manuela Rivera lo niega. La
oferta, indica, se produjo la semana pasada. Esto es, después de que el
Defensor del Ciudadano se personara en el inmueble para hacer público el
desplome de parte del techo e instar a las administraciones implicadas, Junta
de Andalucía y Ayuntamiento de Málaga, así como a la propiedad, a poner arreglo
a la peligrosa situación a la que se exponen diariamente los habitantes del
inmueble.
PORTERO, representante legal del alcalde de Málaga en este asunto, insinúa que el libro El acoso inmobiliario. Una lucha desigual. El caso de Málaga, en el que se recopilan varios casos de acoso inmobiliario en la capital de la Costa del Sol, entre ellos, el de la calle Rosal Blanco nº 6 -consultar AQUÍ- obedece a un posicionamiento político del Defensor del Ciudadano, ya que fue este organismo el que lo publicó.
ESTA revista sostiene que las informaciones que ha ofrecido sobre Rosal Blanco, incluida la del pasado martes 15 son veraces y se ajustan a la realidad, en contra de lo que mantiene el alcalde de Málaga y sus hermanos, tal y como expresa Luis Portero. El hecho de que la primera solicitud de expropiación se produjera en 2007, y que en 2008 la familia De la Torre solicitara la declaración de ruina del caserón, no influye en el hecho que se está censurando: la inacción y dejación del obligado deber del mantenimiento del edificio por parte de la propiedad durante todos los años anteriores a 2007. Cosa que ya se decía en el libro El acoso inmobiliario. Una lucha desigual. El caso de Málaga, editado en 2008 y contra el cual no se ha tramitado ninguna clase de acción judicial.
SOSTIENE Luis Portero que el posicionamiento de la familia del alcalde desde 2007 -solicitar la expropiación, poner la casa a disposición del Ayuntamiento de Málaga y estar dispuesto a cobrar después el justiprecio por la propiedad- es incluso perjudicial para sus propios intereses. El letrado admite que esta postura obedece en parte a la responsabilidad política que pudiera recaer en Francisco de la Torre en caso de que ocurriera una desgracia. Su exigencia de rectificación no es porque se hayan difundido falsedades, sino porque la noticia no ha incluido un dato del que no tenía confirmación por escrito.
POR último, EL OBSERVADOR no ha sido el único medio de comunicación que ha recibido un apercibimiento por parte del alcalde de Málaga por informar de este asunto. También el diario Málaga Hoy recibió notificación y documentación al respecto después de publicar una noticia sobre la situación de Rosal Blanco. La información se rectificó al día siguiente.
PUEDE consultar aquí otras informaciones relacionadas con esta publicación:
- 15/03/11 Rosal Blanco 6, un caso de acoso inmobiliario que el alcalde de Málaga y sus hermanos tratan de arreglar antes de las elecciones tras décadas de abandono, desprecio y condena a la miseria a sus inquilinos
- 18/07/09 Una madre separada con dos hijos menores y una anciana serán desalojadas de una casa de la madre del alcalde de Málaga donde viven de alquiler hace años con ‘okupas’ y en condiciones miserables
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- 20/10/06 El Ayuntamiento de Málaga expropió en 2003 un ruinoso corralón a la madre del alcalde y le evitó así los gastos de rehabilitación necesarios
PORTERO aportó en ese mismo correo electrónico una documentación de la que esta revista carecía para constatar que la primera solicitud de expropiación de la casa de Rosal Blanco se produjo en marzo de 2007, queriendo subrayar con ello que el “alcalde y su familia está
interesada por la situación en la que viven sus inquilinos”. Los arrendatarios
de Rosal Blanco son una madre separada, Manuela Rivera, junto a sus dos hijos y
la septuagenaria Carmen Sarmiento. Aclarada la fecha de la primera solicitud de
expropiación, en nada cambia la información que EL OBSERVADOR dio el martes, que comenzaba así: “La difunta madre del alcalde de Málaga, María Victoria
Prados, el propio regidor, Francisco de la Torre Prados, y sus
hermanos son los responsables, como propietarios del inmueble situado en la
calle Rosal Blanco número 6, de que a día de hoy la casa se caiga a pedazos con
sus inquilinos dentro”. Varios hechos demuestran que pese a lo indicado por
Portero, la familia De la Torre
no se ha interesado durante décadas por sus inquilinos, abandonando su deber de
mantenimiento del edificio hasta solicitar el estado de ruina en 2008.LA casa de Rosal Blanco es de 1890. Carmen Sarmiento lleva habitándola desde que nació hace setenta años. Manuela Rivera vive allí desde 1975. Ambas no han dejado de pagar el alquiler mensual que actualmente es de 70 euros. Hace 12 años, en 1999, se produce la primera denuncia por el alarmante estado de conservación del edificio. No ha sido la única. Hay informes policiales que constatan el abandono y mal estado del caserón desde entonces. Sólo a instancias de los requerimientos de la Gerencia Municipal de Urbanismo de Málaga, la propiedad ha acometido dos mínimas reformas: reponer parte de la escalera que se había desmoronado y reforzar con un puntal una estancia superior que amenaza, aún hoy día, con desplomarse. “Parches que en absoluto han solucionado los problemas de fondo”, tal y como indica el Defensor del Ciudadano, Francisco Gutiérrez, y constata esta revista, que desde 2007 ha comprobado in situ el miserable y desolador estado del inmueble.
AL menos desde 2007 un grupo de okupas se ha instalado en uno de los habitáculos de la parte inferior de la vivienda.
HASTA la semana pasada, nunca nadie de la familia del alcalde Francisco de la Torre se había personado en la casa de sus inquilinos para comprobar el estado de conservación de la misma, afirma Manuela Rivera, quien ya apuntó este hecho en 2007. Los contactos de los arrendatarios con la propiedad han sido a través de un administrador de fincas y se han limitado al pago de las mensualidades, señala Rivera.
PORTERO aseguró el pasado martes a esta revista que en varias
ocasiones la familia del alcalde de Málaga ha
ofrecido personalmente a los inquilinos ser realojados en otras de las
propiedades de la difunta María Victoria Prados. Manuela Rivera lo niega. La
oferta, indica, se produjo la semana pasada. Esto es, después de que el
Defensor del Ciudadano se personara en el inmueble para hacer público el
desplome de parte del techo e instar a las administraciones implicadas, Junta
de Andalucía y Ayuntamiento de Málaga, así como a la propiedad, a poner arreglo
a la peligrosa situación a la que se exponen diariamente los habitantes del
inmueble.PORTERO, representante legal del alcalde de Málaga en este asunto, insinúa que el libro El acoso inmobiliario. Una lucha desigual. El caso de Málaga, en el que se recopilan varios casos de acoso inmobiliario en la capital de la Costa del Sol, entre ellos, el de la calle Rosal Blanco nº 6 -consultar AQUÍ- obedece a un posicionamiento político del Defensor del Ciudadano, ya que fue este organismo el que lo publicó.
ESTA revista sostiene que las informaciones que ha ofrecido sobre Rosal Blanco, incluida la del pasado martes 15 son veraces y se ajustan a la realidad, en contra de lo que mantiene el alcalde de Málaga y sus hermanos, tal y como expresa Luis Portero. El hecho de que la primera solicitud de expropiación se produjera en 2007, y que en 2008 la familia De la Torre solicitara la declaración de ruina del caserón, no influye en el hecho que se está censurando: la inacción y dejación del obligado deber del mantenimiento del edificio por parte de la propiedad durante todos los años anteriores a 2007. Cosa que ya se decía en el libro El acoso inmobiliario. Una lucha desigual. El caso de Málaga, editado en 2008 y contra el cual no se ha tramitado ninguna clase de acción judicial.
SOSTIENE Luis Portero que el posicionamiento de la familia del alcalde desde 2007 -solicitar la expropiación, poner la casa a disposición del Ayuntamiento de Málaga y estar dispuesto a cobrar después el justiprecio por la propiedad- es incluso perjudicial para sus propios intereses. El letrado admite que esta postura obedece en parte a la responsabilidad política que pudiera recaer en Francisco de la Torre en caso de que ocurriera una desgracia. Su exigencia de rectificación no es porque se hayan difundido falsedades, sino porque la noticia no ha incluido un dato del que no tenía confirmación por escrito.
POR último, EL OBSERVADOR no ha sido el único medio de comunicación que ha recibido un apercibimiento por parte del alcalde de Málaga por informar de este asunto. También el diario Málaga Hoy recibió notificación y documentación al respecto después de publicar una noticia sobre la situación de Rosal Blanco. La información se rectificó al día siguiente.
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